Las NIIF para Pymes, en su sección 21, abordan el tratamiento de las provisiones contables; su reconocimiento, medición y diferencias con los pasivos.
Recordemos que las NIIF para Pymes se encuentran compiladas en el anexo 2 del DUR 2420 de 2015, el cual ha sido modificado por los decretos 2496 de 2015; 2101, 2131 y 2132 de 2016; 2170 de 2017, 2483 de 2018, 2270 de 2019, 1432 de 2020, 938 y 1670 de 2021, y el 1611 de 2022.
Veamos detalles sobre el tratamiento de las provisiones contables según las NIIF para Pymes.
¿Qué diferencias existen entre los pasivos y las provisiones contables?
Un pasivo es una obligación presente de la entidad, surgida a raíz de sucesos pasados, que para cancelarla, la entidad espera desprenderse de recursos que incorporan beneficios económicos. Las provisiones son un subconjunto de pasivos.
Dichas provisiones se distinguen de otros pasivos, tales como los acreedores comerciales y otras obligaciones acumuladas (o devengadas) que son objeto de estimación, ya que se caracterizan por la existencia de incertidumbre acerca del momento del vencimiento o de la cuantía de los desembolsos futuros necesarios para proceder a su cancelación.
Tip Alegra: Los requerimientos de la sección 21 de las NIIF para Pymes no se aplican a los pasivos financieros. Estos se contabilizan de acuerdo con los requerimientos de la Sección 11 Instrumentos Financieros Básicos.
¿Cuándo se reconocen contablemente las provisiones contables?
Conforme a la sección 21.4 de las NIIF para Pymes, una entidad sólo reconocerá una provisión cuando:
- La entidad tenga una obligación en la fecha sobre la que se informa como resultado de un suceso pasado.
- Es probable que la entidad tenga que desprenderse de recursos que comporten beneficios económicos, para liquidar la obligación (es decir, cuando exista mayor posibilidad de que ocurra que de lo contrario).
- El importe de la obligación pueda ser estimado de forma fiable.
En cuanto al tratamiento contable de las provisiones, éstas se reconocen como un pasivo en el estado de situación financiera, y el importe de la provisión como un gasto.
¿Cómo se miden las provisiones contables?
A continuación se detalla qué dice la sección 21.7 y 21.11 de las NIIF para Pymes sobre la medición inicial y posterior de las provisiones contables.
| Tipo de medición | NIIF para Pymes |
Medición inicial (sección 21.7) | Cuando el efecto del valor en el tiempo del dinero resulte significativo, el importe de la provisión será el valor presente de los importes que se espera sean requeridos para liquidar la obligación. La tasa de descuento será una tasa antes de impuestos que refleje las evaluaciones actuales del mercado correspondientes al valor en el tiempo del dinero. Los riesgos específicos del pasivo deben reflejarse en la tasa de descuento utilizada o en la estimación de los importes requeridos para liquidar la obligación, pero no en ambos. |
Medición posterior (sección 21.11) | La entidad cargará contra una provisión únicamente los desembolsos para los que fue originalmente reconocida. La entidad revisará y ajustará las provisiones en cada fecha sobre la que se informa para reflejar la mejor estimación actual del importe que sería requerido para cancelar la obligación en esa fecha. Cualquier ajuste a los importes previamente reconocidos se reconocerá en resultados, a menos que la provisión se hubiera reconocido originalmente como parte del costo de un activo. Cuando una provisión se mida por el valor presente del importe que se espera que sea requerido para cancelar la obligación, la reversión del descuento se reconocerá como un costo financiero en los resultados del periodo en que surja. |
Ejemplos sobre el reconocimiento de provisiones contables
Estos son algunos ejemplos indicados en la sección 21 de las NIIF para Pymes sobre el reconocimiento de las provisiones contables.
Ejemplo 1. Una tienda de venta al detalle tiene la política de reembolsar las ventas a los clientes que no estén satisfechos con ellas, incluso en los casos en los que no exista la obligación legal de hacerlo. Esta política de reembolso es ampliamente conocida.
Respuesta: La entidad reconocerá una provisión por importe de la mejor estimación del importe requerido para liquidar los reembolsos. Existe una obligación presente como consecuencia de un suceso pasado que obliga. El suceso que obliga es la venta del producto, que da lugar a la obligación implícita, puesto que el comportamiento de la tienda ha creado una expectativa válida en sus clientes de que reembolsará las compras.
Ejemplo 2: Una entidad determina que es probable que un segmento de sus operaciones incurrirá en pérdidas de operación futuras durante varios años.
Respuesta: La entidad no reconoce ninguna provisión por pérdidas de operación futuras. Las pérdidas futuras esperadas no cumplen la definición de pasivo. La expectativa de pérdidas de operación futuras puede ser indicativa de que uno o más activos están deteriorados.
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