Pasivos ambientales: relevancia y revelación financiera bajo un enfoque de sostenibilidad

Ya no basta con exponer los cambios que presentan las diferentes partidas de los estados financieros o el resultado económico de una entidad, se requiere por parte del  profesional contable una visión general en la que se ubique un análisis contemplando la empresa como parte de una cadena de valor, un sector y un entorno. 

Con esto en mente, en este editorial se aborda bajo el marco de sostenibilidad el concepto de pasivo ambiental, qué es, por qué es importante y qué tipo de información revelar al respecto en las notas a los estados financieros.

¿Qué son los pasivos ambientales?

De acuerdo con el artículo 2 de la Ley 2327 de 2023 los pasivos ambientales son:

“Afectaciones ambientales originadas por actividades antrópicas directa o indirectamente por la mano del hombre, autorizadas o no, acumulativas o no, susceptibles de ser medibles, ubicables y delimitables geográficamente, que generan un nivel de riesgo no aceptable a la vida, la salud humana o el ambiente”.

En otras palabras, los pasivos ambientales son las deudas que una empresa o persona natural tiene con su entorno o la sociedad donde opera debido a los daños realizados en el desarrollo de su objeto social o de forma accidental al medio ambiente y que a la fecha no ha compensado.

Algunos ejemplos de pasivos ambientales pueden ser los residuos textiles vertidos en ríos, los pozos generados por residuos mineros, emisiones de compuestos tóxicos para el ambiente, entre otros.

¿Por qué es importante identificar los pasivos ambientales?

Con la emisión de la NIIF S1 Requerimientos generales para la información financiera a revelar relacionada con la sostenibilidad, cada vez se hace más explícita la necesidad de incluir en las notas a los estados financieros revelaciones sobre aspectos que vayan más allá de los rendimientos económicos o del movimiento de las partidas de los estados financieros.

Todo esto genera un compromiso no solo de corte interno para la gestión y sostenibilidad de la empresa sino también una responsabilidad asociada a toda la cadena de valor, el sector y el entorno en el que está inmersa. 

De acuerdo con los párrafos 43 y 44 de la NIIF S1 es importante hacer referencia en las notas a los estados financieros a la gestión de riesgo y aquí entra a tomar relevancia el concepto de pasivo ambiental debido a que si la entidad identifica un posible riesgo asociado a su operación que derive en afectaciones a su estabilidad financiera, a su cadena de valor o su entorno deberá revelarlo y a su vez, indicar qué repercusiones económicas le generará y sobre todo, qué acciones generará al respecto.

Por otra parte, aunque el Gobierno nacional no ha reglamentado la Ley de pasivos ambientales en Colombia (2327 de 2023), ya se conoce que a través del Comité Nacional para la Gestión de Pasivos Ambientales se generarán las estrategias para la gestión de pasivos ambientales, su identificación, caracterización, evaluación, priorización, monitoreo y seguimiento. Incluso, la normativa ya menciona acciones preventivas y sancionatorias.

Siendo así, ya no se trata de revelar información sobre sostenibilidad como un plus para agregar valor a la toma de decisiones sino que se crea la consciencia y la responsabilidad de revelar este tipo de información en los estados financieros de carácter obligatorio con el fin de mostrar la realidad de la entidad y su impacto en el entorno para tomar decisiones informadas y prever posibles riesgos y sanciones.

¿Cómo revelar información relacionada con pasivos ambientales?

Teniendo en cuenta los párrafos 60 a 62 de la NIIF S1, la información relacionada con pasivos ambientales puede ser incluida como parte de los informes financieros con propósito general, lo que quiere decir que, toda la información que se considere relevante y material podrá hacer parte de las notas a los estados financieros. 

Además, se evidencia que este tipo de información también podrá ser expuesta a la gerencia en otro tipo de informes específicos como los informes de gestión y otros tipos de informes financieros o de gestión estratégica.

En las revelaciones a los estados financieros sobre pasivos ambientales se recomienda incluir toda la información que suponga un riesgo o información relevante para la gerencia, entendiendo que un pasivo ambiental tendrá que evaluarse bajo la lupa de la sección 21 de las NIIF para Pymes. 

A continuación se exponen algunos de los aspectos que se podrían incluir como revelaciones: 

Descripción de los pasivos ambientales, contexto y naturaleza

Se debe exponer una descripción de los pasivos ambientales que la empresa haya identificado los cuales pueden estar relacionados con la contaminación del aire, agua o suelo, la eliminación de residuos, entre otros. Además, incluir qué actividad o situación los origina.

Riesgos que generan cambios en la estructura financiera de la entidad

Se debe exponer qué riesgos ha identificado la entidad que afecten sus flujos de efectivo a futuro, el acceso a financiación o el costo de capital a corto, mediano o largo plazo. Aquí se concentran varios ejemplos:

• Baja reputación que se derive en cancelación de contratos con clientes o proveedores. 
• Litigios o demandas que supongan un pasivo contingente.
• Procesos sancionatorios que generen un desembolso importante que no se tenía previsto.
• Desabastecimiento de materias primas, insumos o recursos.

Planes de inversión, disposición o financiación

Con base en las estrategias de sostenibilidad que se esperan implementar en términos de reparar los daños derivados o previstos de la operación, seguramente surjan requerimientos de capital para nuevos equipos, reforestación, purificación, entre otros.

Para esto se debe revelar bajo qué fuentes se obtendrá este capital y qué se espera realizar con él en pro de la sostenibilidad de la entidad y su cadena de valor.

Riesgos y oportunidades que surjan en la interacción con partes interesadas

Se entiende como partes interesadas a la sociedad, la economía y en general al entorno de la empresa. En este aspecto se pide exponer el impacto que se deriva de las interacciones directas e indirectas de la empresa a lo largo de su cadena de valor, si las acciones de la empresa se derivan en la preservación y regeneración de los recursos o si por el contrario generan su degradación y agotamiento.

Cambios en la regulación nacional o internacional

El mundo se está moviendo en pro de la sostenibilidad, lo que antes no suponía un riesgo, ahora es determinante, por tanto, la entidad tendrá que evidenciar en sus estados financieros si por alguna regulación su operación genera un pasivo ambiental y si con base en esta regulación está en riesgo el cumplimiento de la hipótesis de negocio en marcha.

Un ejemplo de esto son las normas alusivas a los plásticos de un solo uso que generan un cambio drástico para las empresas enfocadas en la producción de empaques.

Todos estos puntos y la nueva regulación direccionan a las empresas a realizar una gestión transparente y responsable de los recursos. Si deseas ampliar tu conocimiento sobre la norma de sostenibilidad, te invitamos a conocer nuestros editoriales: Preparación de informes de sostenibilidad 2024: 10 preguntas que todo contador debe conocer e Implementación de NIIF S: datos clave sobre los informes de sostenibilidad.

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